La ministra rusa de Asuntos Exteriores califica de “indignación” el acto de Occidente ante la compra de cereales
El acto de los países occidentales de realizar la compra de cereales en el Mar Negro es “indignante”, dijo el ministro ruso de Supuestos Exteriores, Serguéi Lavrov, en un encuentro informativo con periodistas que celebra este verano.
Lavrov respondió a las consultas de Moscú sobre el supuesto incumplimiento por parte de Occidente de lo que calificó de “paquete” de compra emitido el pasado mes de julio: un pacto entre la ONU y Rusia —según al mismo tiempo que el acuerdo que permite la exportación de grano ukranio— para facilitar los envíos de grano de Rusia.
Rusia ha amenazado con no prorrogar el acuerdo, que expira el 18 de julio.
William Moseley, integrante del Grupo de Alto Nivel de Expertos en Seguridad Alimentaria de la ONU, dijo a CNN que tiene “la sincera esperanza de renunciar al filo”.
“A crash at the time of prorrogar el acuerdo sobre el grano del Mar Negro sería perturbador… para los países importadores de grano de Oriente Medio, el Norte de África y el Cuerno de África en particular”, dijo Moseley.
“Ucrania también ha ubicado un importante procesador de alimentos para el Programa Mundial de Alimentos, que brinda ayuda alimentaria de emergencia a toda la gente pobre del mundo”, agregó.
Lavrov también dijo en Rueda de Prensa que “no hay de qué preocuparse” por parte de Rusia frente a la efímera rebelión de Wagner.
Consultado por las acciones del pasado fin de semana, Lavrov dijo: “Saben, no estamos obligados a explicar nada a nadie, a no dar ninguna garantía… El presidente habló sobre este tema, todas las fuerzas políticas del país hablaron sobre este tema”. Si alguien en Occidente tiene alguna duda, es un problema.
“Por nuestros intereses nacionales, gracias por su preocupación, no hay por qué preocupación. Rusia siempre ha salido cada vez más fuerte de cualquier problema”, agregó.